Sobre los regímenes totalitarios:
Un régimen de este tipo, es aquel donde está seriamente restringida la libertad, algo que, en mi opinión es inaceptable. A diferencia de otros sistemas políticos (como el Marxismo), el totalitarismo busca llegar al poder, establecerse y mantenerse allí, única y exclusivamente para beneficiarse un grupo muy minoritario y privilegiado, ignorando al resto del pueblo, como ocurrió en el caso del Franquismo en España. El "ser superior" que está en el alto mando de un Estado Totalitario, lo hace solo por su bien, ignorando los verdaderos problemas de manera egoísta, o beneficiar a instituciones independientes, por ejemplo, en el caso del Franquismo, a la Iglesia Católica, al III Reich Alemán o a grandes terratenientes y adinerados.
Otra cosa es, imponer a una persona en el alto mando del Estado, para que actúe en situaciones de gran gravedad, tomando el modelo del Dictador romano o el Tirano griego, siempre siendo nombrados o por el pueblo, o en su extrema situación, por él mismo, respetando al pueblo y trabajando para y por el pueblo.
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Curiosamente Orwell detestaba el estalinismo marxista de la URSS.
ResponderEliminarEs penoso ver como Stalin, transformó el marxismo en un billete de ida al poder absoluto. Aun que no por eso, el marxismo debe ser semejante a Stalin. La Iglesia Católica también quemaba públicamente a gente inocente en la hoguera en nombre de Dios, y nadie lo ha condenado (tambiein es cierto que ocurrió hace 500 años, mientras que Stalin 70 años)
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